Terapeuta, orientador, Life Coach y mediador. Entrenador de terapeutas

Terapia breve significa en esencia que el proceso va a estar orientado a lograr el resultado concreto que la(s) persona(as) plantean en consulta.  Y en segundo lugar que se han desarrollado métodos que conducen directamente a resolver la situación en la menor cantidad de sesiones posibles. Serán tantas como los consultantes decidan.

Es un enfoque de terapia que tienen sus orígenes en los métodos del destabado y renombrado terapeuta, Milton Erickson.  Desarrollado por Steve deShazer e Isso Kim Berg, contando con una conjunto de codesarrolladores desde sus inicios hasta la actualidad. Es un enfoque construccional, anormativista, es decir no patologizante que trabaja con los recursos del consultante, para lograr el resultado propuesto por este, enfocandose en los avances hacia dicho resultado, sin centrarse en un problema como tal.

Se encuentra entre las terapias basadas en evidencia reconocida por la Asociación Americana de Psicología.  Existe un sin número de investigaciones científicas que demustran su eficacia.

Es un enfoque de psicoterapia que en principio funciona para todos.  Es anomativista, por lo tanto son métodos diseñados para adaptarese a cualquier persona haya sido o no etiquetada con un diagnóstico psiquiátrico.

Sí,  estudios demostran que la terapia en línea puede ser tan efectiva como la terapia presencial para una amplia gama de problemas psicológicos, incluyendo depresión, estrés, ansiedad y otras quejas que pueda presentar la persona.  Claro que hay consultantes y también terapéutas que prefieren la presencialidad por las ventajas del cara a cara.

La filosofía sesión única se refiere a una actitud del terapeuta que parte del supuesto de que cada sesión puede ser la única o la última que tenga con el consultante. En este enfoque no se hacen evaluaciones psicométricas ni una anamnesis, ni psicodiagnóstico. Desde la 1ra. sesión se hace intervención, como si fuera la única para lograr los resultados, con la apertura de que hayan subsiguientes. Y en cada una de las sesiones se trabaja con la misma actitud, aunque se le de seguimiento al progreso de los resultados.

Las investigacione a este respecto han concluído que entre 1 y 6 sesiones en promedio son suficientes para acanzar al menos el 80% de los resultados desados y planteados por los consultantes.

Una de las primeras influencias y que de hecho se considera el origen del desarrollo de este y otros enfoques es Milton Erickson.  Entre los desarrolladores y codesarroladores se encuentran Steve de Shazer por supuesto, Bill O’Hanlom.  Y entre los que proponen algunas varientes dentro del enfoque de terapia Centrada en soluciones el Brief de Londres (Evan Geoge, Cris Iverson) y el Solution Focus Universe de Texas.  Fuera del enfoque puramente de terapia Centrada en soluciones se encuentra el MRI de Palo Alto, la Terapia Narrativa de Michael White y David Epson.  Y luego está una pléyade de terapeutas y teóricos que harían la lista muy amplia, por lo cual solo mencionaré uno: Emilio Ribes Iñesta.

Con la finalidad de poder dedicar mas enfoque a las consultas en curso, para dedicar hasta una hora adicional a transcripción, análisis de soluciones y planificación d ela siguiente sesión.

Para combinar la psicoterapia con otras actividades de la vida, con la formación continua y otras actividades laborales.

Con la finalidad de autocuidado para no llegar al bernout y brindar un servicio de manera óptima.

Por todas esas razónes Alexis Rodríguez solo rezliza 9 sesiones de terapia a la semana.

Las sesiones tienen una duración promedio de 60 minutos en promedio.  En el caso de la primera sesión, en ocasiones se alarga un poco más, pudiendo llegar hasta los 75 minutos (1 hora y 15 minutos) dependiendo de la disponibilidad tanto del terapeuta como del consultante.

Significa que no se trabaja con un diagnóstico,  ni con categorías diagnósticas.  Es un enfoque construccional, no patologizante.  En este enfoque no se trata de imitar el modelo médico como en otros. No se clasifican las personas en normales o anormales.  Se trabaja con personas, no con diagnósticos o casos.

Se trabaja desde los recursos de las personas, sin clasificar su conducta en normal o anormal.  El foco de la terapia son los resultados esperados por las personas y pautados desde la sesión inicial.